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Opinión del experto. Es de admirar que fabricantes como Elite apuesten por la sostenibilidad a la hora de fabricar sus productos; y no solo eso, sino que lo hagan pensando en todo el proceso de vida útil del producto. El bidón Elite Jet es un buen ejemplo de ello, una botella biodegradable cuya máxima es simple pero valiosa: dejar la mínima huella posible.
Como anunciábamos un poco más arriba, si hay que reseñar (por encima del resto de características) de este bidón Elite Jet es su capacidad para descomponerse naturalmente en un periodo de tiempo estimado de 3 meses a 5 años; es, por tanto, una botella biodegradable ☘️
Su secreto radica en un proceso de fabricación, que utiliza el polietileno como base principal de su composición (ya de por sí es un plástico biodegradable). Añadido a lo anterior, se le suma un pequeño aditivo que incrementa la velocidad de descomposición gracias a la acción de microorganismos.
Por lo demás, cuenta con unas dimensiones estándar de 74 mm de ancho, de gran ergonomía, así como una boquilla que proporciona gran caudal y limpieza.
Disponible en versiones de 750 y 950 ml.
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